Cuál puede ser la causa de sufrir una taquicardia, qué hacer y qué riesgo tiene

El ejercicio, los nervios o las bebidas estimulantes pueden acelerar el corazón y provocar una taquicardia, pero en ocasiones el corazón va más deprisa por alguna anomalía que debe evaluar un médico.

Actualizado a
Actualizacion taquicardia
iStock

El corazón se acelera si haces ejercicio intenso o por nervios, pero puedes sufrir taquicardia por alguna anomalía.

Teresa Romanillos cardiologa
Dra. Teresa Romanillos

Cardióloga y especialista en Medicina Interna

Eva Mimbrero
Eva Mimbrero

Periodista especializada en salud

La taquicardia es un aumento de la frecuencia cardíaca. La mayoría de las veces el corazón se acelera por situaciones que no conllevan peligro como el ejercicio, los nervios, las bebidas estimulantes o la fiebre (los latidos se aceleran para garantizar que tu cuerpo está preparado para combatir la infección), pero a veces el corazón va más deprisa sin una causa aparente, por lo que puede ser síntoma de alguna anomalía. La cardióloga Teresa Romanillos nos explica cuándo tiene riesgos.

taquicardias y anomalías en el corazón

Con menor frecuencia, las taquicardias responden a alguna anomalía en este órgano.

Se trata de un mal funcionamiento en el sistema de cables del corazón que conduce los impulsos eléctricos. Al activarse, provoca pequeños cortocircuitos que pueden hacer que el corazón lata rápidamente, como desbocado.

Este tipo de taquicardias puede durar desde pocos minutos hasta horas, y suelen empezar y acabar de forma súbita.

Cómo saber si la taquicardia es por algo grave

Algunas señales pueden ayudarte a diferenciar una taquicardia producida por ansiedad o por el exceso de café, de otra causada por una anomalía eléctrica del corazón.

  • Si es por nervios, la taquicardia tiene un menor número de latidos por minuto (menos de 120) y acaba paulatinamente.
  • Si hay una anomalía en el corazón, el número de pulsaciones es mayor y finaliza de repente.

De todas maneras, si sufres taquicardias consúltalo con tu médico. Y si finalmente te diagnostican una anomalía eléctrica del corazón no te alarmes, en la mayoría de los casos tiene solución.

Fármacos que pueden provocar taquicardias

Hay medicamentos que pueden provocar alteraciones en el compás de los latidos, sobre todo en personas con corazones más sensibles o que tengan predisposición a padecer arritmias.

  • Anti-catarrales de uso común. Los que contienen sustancias como la efedrina o algunos de sus derivados aceleran las pulsaciones. Asimismo, estos preparados pueden contener cafeína, que también activa el corazón.
  • Inhaladores habituales para el asma. Algunos acaban acelerando las pulsaciones del corazón. Se trata del conocido como salbutamol y sus derivados. Si estás siguiendo un tratamiento para un catarro fuerte o una bronquitis, procura no tomar estos medicamentos al mismo tiempo (deja pasar unas horas entre uno y otro). También se aconseja no ingerirlos junto con bebidas estimulantes como el café o el té.
  • Ciertos antibióticos, así como determinados preparados que se recetan para la ansiedad o la depresión. Si notas que las pulsaciones de tu corazón se han alterado desde que has empezado un tratamiento de este tipo, consulta con tu médico.

Estrés y taquicardias

El corazón permanece siempre alerta a lo que ocurre en tu organismo y es sensible a cualquier cambio. Por eso, una de las causas más frecuentes de taquicardias es el estrés y la ansiedad.

En este caso, la inquietud hace que todo tu cuerpo esté en alerta continua y, por este motivo, el corazón late más rápido, como si estuviera preparado para responder de inmediato a la supuesta amenaza.

Otras causas que provocan taquicardia

Hay enfermedades que, aunque no son propias del corazón, acaban aumentando sus pulsaciones.

  • Enfermedades respiratorias como la bronquitis crónica o el enfisema. El corazón necesita bombear más sangre para compensar la falta de oxígeno provocada por el fallo pulmonar.
  • Anemia. Al tener menos glóbulos rojos para transportar el oxígeno a todo el organismo, aumenta el riego sanguíneo.
  • Hipertiroidismo. Si la glándula tiroides produce más hormonas de las necesarias, todo el organismo, incluido el corazón, se acelera.
  • La menopausia también puede provocar en algunas ocasiones alteraciones en el ritmo del corazón, dando lugar a leves palpitaciones y taquicardias.

Claves para controlar las taquicardias

  • Limita las bebidas estimulantes como el café, el té o el cacao. Evita sobre todo las energéticas, pueden llevar mucha cafeína.
  • El tabaco y el alcohol pueden acelerar el ritmo cardiaco y favorecer los latidos irregulares.
  • Controla tu ansiedad y procura evitar situaciones de estrés. El yoga puede ayudarte.
  • Practica ejercicio moderado. La actividad física modula el ritmo del corazón.

Un truco para bajar las pulsaciones

Si tu corazón late muy rápido, hay un pequeño truco que puede ayudarte:

  • Coge aire profundamente y aguanta la respiración haciendo fuerza con el abdomen; con un poco de suerte, esto puede finalizar la taquicardia.
  • De todas maneras, si te ocurre más de una vez consúltalo con tu médico para descartar que no se trate de una anomalía eléctrica del corazón.