Pasamos una media de más de 3 horas diarias exponiendo el rostro a la luz de las pantallas de móviles, tabletas u ordenadores. Ya sea leyendo emails del trabajo, whatsapps de familiares y amigos, redes sociales... Así lo revela una encuesta realizada por WhisleOut.
Y esa sobreexposición a la luz azul que emiten estos dispositivos puede tener consecuencias para la piel a largo plazo.
¿La luz de las pantallas es como la del sol?
Rotundamente no, y esta la primera aclaración que cabe hacer.
"Nuestra principal fuente de luz azul es el sol. La luz que recibimos de los dispositivos móviles es mucho menos energética y sus efectos para la piel no son comparables. Por tanto, el llamado envejecimiento digital es poco dañino en comparación con el producido por el sol, pero es cierto que todo suma", aclara la Dra. Marta Frieyro, Jefa del Servicio de Dermatología y Venereología del Hospital Quirónsalud Marbella.
Y si todo suma, cuantas más horas pases frente a una pantalla, mayor factura le pasarás a tu piel.
Una advertencia a tener muy en cuenta en la situación actual de pandemia que vivimos porque la exposición a móviles, ordenadores y tabletas se ha disparado por el teletrabajo, las reuniones y clases online... Todo es mucho más virtual.
Qué efecto tiene la luz azul en tu piel
La luz azul se utiliza en dermatología como una herramienta terapéutica. Sin embargo, hay estudios que demuestran que un uso abusivo puede tener consecuencias negativas para la piel:
- Aumenta la sequedad de la piel porque disminuye las acuaporinas, las moléculas que ayudan a mantener su hidratación.
- Altera la síntesis de algunas proteínas, en concreto aumentan la metalproteinasas, lo que acelera la destrucción de colágeno.
- Activa los melanocitos, incrementando la melanina cutánea.
Todo ello se traduce en un aumento de las ojeras, las arrugas y las líneas de expresión, las manchas y la sequedad.
Curiosamente, las personas más vulnerables a sufrir una hiperpigmentación por luz azul son aquellas que tienen un fototipo de piel alto (piel más morena) ya que sus células ya tienden de por sí a producir más melanina.
- Las embarazadas y las personas que se someten a tratamientos cutáneos también tienen más riesgo de manchas por la sobreexposición a las pantallas ya que su piel está más sensible.
¿Ponerte crema para trabajar?
Tenemos muy interiorizado que debemos protegernos la piel si nos exponemos a la luz solar. Pero no tenemos la misma actitud si nos ponemos frente a un ordenador.
Es más, desde que el teletrabajo se ha instalado en la vida de muchos, el uso de productos cosméticos se ha descuidado.
Sin embargo, aunque pueda resultar chocante ponerse una crema protectora en la cara antes de ponerse a trabajar frente a la pantalla del ordenador, "esta es la manera de prevenir la aparición de manchas, sobre todo en la zona de los pómulos y la barbilla, así como un envejecimiento prematuro de la piel", afirma Alicia Flores, experta en cosmética, dermatología y estética, y cofundadora de Clínicas Láser Fusión.
Las casas de cosmética han apostado ya por nuevos productos dirigidos a contrarrestar específicamente la erosión provocada por la luz azul.
Actúan de la misma forma que los protectores solares que utilizamos frente a los rayos ultravioleta e infrarrojos (UVA, UVB e IR) cuando salimos al exterior, y además "ejercen la función de escudo protector frente a la radiación HEV (luz azul)", puntualiza Flores.
Y no olvides que puedes reducir la luz azul de tus dispositivos instalando filtros de este tipo de luz.
casi 9 años de tu vida mirando el móvil
Un estudio revela que habría que pasar 48 horas seguidas expuesto a la luz azul del móvil para ver efectos inmediatos en la piel.
Pero si nos fijamos en los resultados de la encuesta realizada por WhisleOut entre usuarios de teléfonos inteligentes, es fácil comprender que a largo plazo el uso del móvil pase factura a la piel. Son demasiadas horas frente a él:
- Pasamos una media de 76.500 horas mirando el móvil a lo largo de nuestra vida, lo que equivale a 8,74 años.
- Los que pasan más horas mirando el móvil (3,7 horas) son los millennials (nacidos entre 1981 y 1993).
- El tiempo promedio diario frente a la pantalla disminuye a medida que aumenta la edad. La generación X (1969-1980) pasa 3 horas y los boomers 2,5 horas (nacidos entre 1945 y 1964).