Cuándo hay que hacer una densitometría y qué revelan sus resultados

A partir de los 55 o los 60 años, todas las mujeres deberían hacerse una densitometría para detectar una posible osteoporosis. Pero también hay otros supuestos en los que conviene recurrir a esta prueba que mide la salud de tus huesos.

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densitometria

Mujer paseo bici

Soledad López
Soledad López

Periodista especializada en salud

Unos huesos frágiles aumentan el riesgo de fractura. Sin embargo, la osteoporosis es una enfermedad que no avisa, no da síntomas, hasta que el hueso se rompe o la columna se encorva.

Y si hay un sector de población predispuesto a sufrirla es la mujer tras la menopausia.

Una de cada dos mujeres postmenopáusicas tiene riesgo de osteoporosis

  • Por ello en esta etapa es muy importante someterse a densitometrías de forma regular para detectar la enfermedad a tiempo y actuar en consecuencia.

Por qué la menopausia afecta a los huesos

  • Durante esta etapa de la vida de la mujer se produce un descenso de estrógenos, unas hormonas que participan activamente en la formación de hueso.
  • No hay que olvidar que el hueso es un tejido vivo que se regenera constantemente. Cuando la densidad ósea es la idónea existe un equilibrio entre las células generadoras de hueso (osteoblastos) y las destructoras de hueso (osteoclastos).
  • Los estrógenos estimulan la acción de los osteoblastos e inhiben los osteoclastos, por eso cuando descienden en picado al llegar la menopausia la densidad ósea se resiente.

los detalles de una densitometría

El Dr. Xavier Nogués, jefe del Servicio de Medicina Interna del Hospital del Mar de Barcelona, nos explica en qué consiste esta prueba.

Qué analiza exactamente

  • La densitometría mide la cantidad de tejido óseo que está calcificado. No hay que olvidar que más del 90% del calcio que hay en el organismo se localiza en los huesos, por ello cuando se debilitan al desmineralizarse.
  • Pero, además de la densidad ósea, desde hace unos años la tecnología permite medir lo que podríamos llamar el entramado del hueso, es decir, la trabécula. El hueso está formado principalmente por colágeno que se solidifica con el calcio. Por dentro podría compararse con el entramado de un jersey (la trabécula) que con el tiempo se abre por el desgaste o incluso se rompe en algunos puntos.

No entraña riesgos

  • El aparato que se utiliza para medir la densidad ósea utiliza rayos X, pero irradia una décima parte de lo que emite una radiografía de tórax.
  • La irradiación es tan baja que no entraña ningún riesgo. "Tanto es así –explica del Dr. Nogués– que se podrían realizar 10 densitometrías a una persona en un solo día y no pasaría nada. A pesar de ello no se realiza a mujeres embarazadas".

Una simple radiografía de tórax irradia 10 veces más rayos X que la densitometría

  • De hecho, el aparato no necesita estar en ninguna sala específica de rayos X blindada con materiales como el plomo para atenuar el efecto de la radiación.

Rápida y sencilla

  • Normalmente los huesos que se analizan son la columna y la cadera.
  • No requiere ninguna preparación especial y con los aparatos más modernos se realiza en apenas 10 minutos.

Cómo se interpretan los resultados

El valor resultante de la densitometría es comparable, tal y como asegura el Dr. Nogués, "a las curvas de crecimiento que realizan los pediatras a los niños. La interpretación de esas curvas establece que el crecimiento del niño está dentro de lo normal, o bien por encima o por debajo".

Valores por debajo de -2,5 indican osteoporosis

La medición que realiza la densitometría es similar. Se considera que hay osteoporosis cuando hay una desviación con respecto a los valores de densidad mineral del hueso que se consideran normales.

  • Se considera osteopenia (es la antesala de la osteoporosis) cuando el valor está entre -1,5 y -2,5.
  • Hay osteoporosis cuando está por debajo de -2,5.

Cuándo debe realizarse esta prueba

Como ya hemos explicado, las mujeres postmenopáusicas son las que tienen más riesgo de osteoporosis y, por lo tanto, de fractura. Por ello:

  • Se aconseja realizar una densitometría a partir de los 55 o los 60 años. Antes no es necesario, a no ser que se sumen otros factores de riesgo.

Pero hay otros supuestos en los que también se recomienda realizarla porque hay riesgo de desmineralización del hueso.

  • En los hombres se recomienda entre los 65 y los 70 años.
  • En caso de menopausia precoz también es necesaria. Una mujer que se le retira la regla alrededor de los 40 años es una candidata a sufrir osteoporosis y debe someterse a densitometrías de forma regular.
  • Si la mujer tiene antecedentes de osteoporosis en la familia y además es fumadora.
  • Aquellas personas que toman medicación con cortisona (es frecuente en enfermedades respiratorias) también tienen más riesgo de pérdida ósea.
  • En caso de anorexia nerviosa.

Si estás en un grupo de riesgo debes hacerte una densitometría cada dos años

  • En pacientes de cáncer de mama que reciben tratamientos que bloquean los estrógenos.
  • Hombres en tratamiento de cáncer de próstata.

En todos estos casos (también en mujeres postmenopáusicas) se aconseja una densitometría cada dos años.