Se sabe que la hormona prolactina tiene un papel importante en la producción de leche durante el embarazo y la lactancia.
Ahora, dos nuevos estudios apuntan a que también podría estar vinculada con el desarrollo del cáncer de mama, algo que podría ayudar a crear nuevos fármacos para diagnosticarlo y tratarlo.
¿Qué es la hormona prolactina?
La prolactina es una hormona que produce la glándula pituitaria o hipófisis (una pequeña glándula situada en la base del cerebro).
Es la responsable de que las mamas crezcan y produzcan leche durante el embarazo y tras el parto, por lo que es normal que sus niveles sean altos en las mujeres embarazadas y en aquellas que acaban de dar a luz.
En los hombres y las mujeres que no están embarazadas, por el contrario, los niveles suelen ser bajos.
Unos niveles altos pueden ser debidos al estrés o al uso de determinados medicamentos, o también podrían ser señal de un tumor en la glándula pituitaria (llamado prolactinoma), que suele ser benigno, pero puede causar problemas menstruales e infertilidad en mujeres y disfunción eréctil en los hombres.
Qué papel tiene en el cáncer de mama
Desde hace tiempo se estudia el vínculo entre la prolactina y el cáncer de mama. Recientemente, dos estudios han investigado cuál es el mecanismo que relacionaría esta hormona con la enfermedad.
Las hormonas tienen unas proteínas llamadas receptores en la superficie de las células que las conforman. Estos receptores reciben y mandan mensajes que regulan la función de las células.
Investigadores americanos han hallado una nueva forma alterada del receptor de la prolactina (llamado hPRLrI, isoforma intermedia del receptor de la prolactina humana) que podría estar implicada en el cáncer de mama.
En el estudio publicado en npj Breast Cancer, los autores explican que esta versión modificada del receptor de la prolactina interactúa con otras formas del receptor para transformar las células benignas de la mama en células malignas.
De acuerdo con los autores, la presencia del hPRLrI en las células del cáncer de mama se asocia con el cáncer de mama triple negativo, una tasa rápida de reproducción celular y un mal pronóstico.
“Esta investigación desafía el dogma de que la prolactina solo funciona en la producción de leche y pone de relieve el descubrimiento de que la hormona puede contribuir al cáncer de mama”, indica el Dr. Charles Clevenger, uno de los autores del estudio.
Clave para el desarrollo de nuevos tratamientos
Este hallazgo abre la vía al desarrollo de nuevos fármacos y tratamientos dirigidos específicamente al esta forma alterada del receptor de la prolactina.
Y no solo para el tratamiento, también podría ayudar al desarrollar herramientas para el diagnóstico precoz del cáncer de mama.
“Al comprender cómo se correlaciona el receptor de la prolactina con el cáncer de mama, se pueden desarrollar nuevos agentes terapéuticos y de pronóstico para tratar eficazmente la enfermedad”, destacan los investigadores.
En otro estudio publicado en la revista Endocrinology se ha logrado, en pruebas de laboratorio, evitar el crecimiento tumoral en un modelo de cáncer de mama ER-positivo utilizando un fármaco (el inhibidor HDAC6) que bloquea una proteína asociada con la prolactina.
- Anteriormente, ya se había logrado retrasar el crecimiento del cáncer de mama en el laboratorio desactivando la vía genética responsable de la producción de prolactina (la proteína Stat5).
¿Cómo han evitado el crecimiento tumoral?
Los científicos han descubierto que la función reguladora de la prolactina de la proteína Stat5 depende a la vez de la enzima HDAC6 y del gen HMGN2.
También han visto que el receptor de estrógeno (ER) (una hormona que se cree que influye en el desarrollo del cáncer de mama) interactúa con la proteína Stat5 en sitios donde también están presentes la enzima HDAC6 y el gen HMGN2.
- Esto, de acuerdo con los investigadores, sugiere que el receptor de estrógeno y el receptor de prolactina pueden cooperar mediante la activación de la Stat5 para iniciar el desarrollo del cáncer de mama.
Y es por ello que el tratamiento de las células del cáncer de mama ER-positivo con un inhibidor de la enzima HDAC6 obstaculiza la progresión del tumor.
Los estudios están todavía en fases tempranas, pero representan un avance prometedor en la lucha contra el cáncer de mama.
"El análisis global de la expresión génica reveló nuevamente que la prolactina está estrechamente asociada con el crecimiento del cáncer de mama y se podría controlar con el tratamiento con un inhibidor de la HDAC6", indica Clevenger, que ha participado también en este estudio.